La terapia de plasma rico en plaquetas (PRP)
La terapia de plasma rico en plaquetas (PRP) es un tratamiento nuevo e innovador para lesiones y enfermedades crónicas. Las plaquetas son conocidas para coagular la sangre, pero también contienen factores de crecimiento, proteínas especiales que ayudan a curar los tejidos. La terapia con PRP permite mejorar el proceso de curación y regeneración mediante la aportación de sustancias bioactivas que se obtienen mediante un pequeño volumen de sangre del mismo paciente.
Las aplicaciones terapéuticas del PRP son muy diversas. Desde hace años se utiliza como coagulante y compactado de injertos óseos. En los últimos años, se sugieren nuevas terapias fundamentadas en el potencial proregenerativos y antiinflamatorios de los llamados factores de crecimiento que las plaquetas liberan cuando se activa la coagulación.
Actualmente, los factores de crecimiento son utilizados en patología tendinosa, ligamentosa, muscular, articular, cutánea, condral y ósea. Se pueden aplicar de forma ambulatoria o en intervenciones quirúrgicas. Además, existen diferentes líneas de investigación que permitirán, en un futuro, ampliar el abanico de aplicaciones de los factores de crecimiento.
La eficacia del PRP depende, en gran medida, de los métodos que se siguen en su preparación y forma de aplicación. Nosotros utilizamos, con gran rendimiento, el PRP leucocitario.
El Plasma Rico en Plaquetas (PRP) es un producto biológico, autólogo, no tóxico ni alérgeno. Se considera un tratamiento de uso humano gracias a su especificidad biológica. Se obtiene mediante la centrifugación de la sangre, disponiendo sus componentes-hematies-leucocitos-plaquetas y proteínas- en diferentes fracciones según el gradiente de su densidad.
Mediante 4 fases: extracción, transferencia, concentración y selección
Primero, se hace una pequeña extracción de sangre del paciente (fase de extracción). Esta sangre se introduce en un tubo especial diseñado para poder hacerse la centrifugación (Fase de transferencia). Las plaquetas se separan de los otros componentes de la sangre por un equipo con tecnología Cells emotion®, que permite obtener el máximo de todo el potencial biológico y terapéutico de las células del paciente. (Fase de concentración) Esta tecnología está basada en una centrifugación diferencial, rotor oscilando, ciclo trifásico específico y un tiempo de procesamiento mínimo.
Una vez separadas las células, se obtienen las plaquetas que están preparadas para ser inyectadas (fase de selección). Este proceso se hace en un ambiente de esterilización y de higiene sanitaria, como cualquier procedimiento de los que se realizan a quirófano, para la máxima seguridad del paciente.
Los mecanismos de actuación del PRP son varios. Incluyen varios efectos:
Regenerativo: disminuye el tiempo y mejora la calidad de curación. Reduce la fibrosis. Mejora la movilidad articular y la función física.
Antiinflamatorio: reduciendo la inflamación y el dolor.
Angiogénico: Incrementa la microvascularización en la zona donde se aplica.
Bacteriostático y Bactericida: actuando sobre gérmenes como staphylococcus Aureus y otros.
– Lesiones tendinosas crónicas: Las más comunes son lesiones del manguito de los rotadores en cuanto al hombro (hombro doloroso), epicondilitis (codo de tenista), tendinitis de Aquiles, tendinopatía femoropatelar en la rodilla, tendinopatía de la muñeca (De Quervain ).
– Lesiones meniscales y ligamentos.
– Lesiones musculares, fascias y tejidos blandos: – terapia PRP ha recibido mucha publicidad para el tratamiento de los ligamentos y lesiones musculares agudas relacionadas con el deporte. La fascitis plantar.
– Discopatía intervertebral: discopatía degenerativa. Dolor lumbar de origen discal. Esta terapia es innovadora y precisa de especialización en técnicas intradiscales. Nuestro equipo es pionero en este tipo de tratamiento, utilizando siempre técnicas ecográficas y/o radioscopia para garantizar la correcta aplicación de los factores de crecimiento.
–Lesiones crónicas degenerativas articulares como la artrosis: de rodilla, de cadera, vertebral, tobillo. Nuestro equipo es especialista en la inyección de PRP en el ámbito articular mediante técnicas de imagen como la ecografía, de manera sencilla y rápida.
–Heridas quirúrgicas.
-Necrosis avascular.
Los estudios de investigación muestran que el tratamiento PRP es muy eficaz para muchas lesiones y enfermedades agudas y crónicas. Los factores que influyen en la eficacia de PRP son:
. El área del cuerpo que se está tratando.
. La duración de la lesión.
. El estado general de salud del paciente.
-Se pueden administrar en todas las edades.
-Se pueden administrar en pacientes que han tenido cáncer, siempre que el lugar de administración sea diferente y siempre que el riesgo de infección no sea muy alto por la inmunosupresión.
-No es un proceso doloroso, a pesar de que en la mayoría de las ocasiones se administra bajo sedación ligera por confortabilidad del paciente.
-Se pueden administrar siempre que la cifra de plaquetas no sea inferior a 60000.
-No tienen riesgos importantes, el principal es la infección que se puede minimizar asegurando unas medidas de asepsia Standard.
-Los principales efectos secundarios tienen relación con la inyección de un volumen de líquido a la zona intraarticular que puede dar lugar a sensación de dolor o molestias que pueden durar hasta 48 horas después de la administración.